Juana Larrauri : Con el surgimiento del peronismo entre 1943-1945 y el triunfo de Juan D. Perón en las elecciones presidenciales de 1946, Juanita adhirió al peronismo y dedicó sus esfuerzos a la actividad política. En ese momento, las mujeres en la Argentina tenían prohibido actuar en la vida política, por lo que Juanita Larrauri integró el grupo de mujeres que, lideradas por Eva Perón, impulsó la sanción de la ley del voto femenino, aprobada finalmente en 1947 por ley 13.010.
Una vez reconocidos los derechos políticos de las mujeres, Juanita Larrauri integró, como encargada de la provincia de Entre Ríos, la conducción nacional del Partido Peronista Femenino, presidido por Eva Perón, junto con Águeda Barro, Dora Gaeta, María Rosa Calviño, Amparo Pérez y Delia Parodi.
En las elecciones de 1951, Juanita Larrauri fue elegida senadora nacional en representación de la provincia de Entre Ríos, constituyéndose así en la primera senadora argentina. Ese mismo año Juanita cantó el tema "Evita Capitana", que fue adoptado como el himno femenino peronista. El tema fue originalmente grabado con el acompañamiento de la Orquesta de la A.P.O dirigida por Domingo Marafiotti y el Coro de la Sociedad dirigido por Héctor Artola. En 1952 fue designada presidenta de la Comisión para el Monumento a Eva Perón creada por la Ley 14.124.3
Juanita Larrauri en 1972.
Fue derrocada con todos los representantes democráticos por el golpe de estado del 16 de septiembre de 1955 y encarcelada por la dictadura militar.
Durante el período de ilegalización del peronismo (1955-1972) se convirtió en una de las principales dirigentes de la rama femenina del movimiento de lo que se conoce como la "resistencia peronista".5 Cuando el Partido Justicialista volvió a ser legalizado en 1972, integró el Consejo Superior del mismo, en representación de la Rama Femenina del movimiento. En el seno del mismo adoptó una posición contraria a la conducción de Jorge Daniel Paladino.6 En 1972 integró la delegación que acompañó a Juan D. Perón en su regreso a la Argentina.7
En 1973 volvió a ser electa senadora nacional, volviendo a ser derrocada con todos los representantes democráticos, por el golpe de estado militar del 24 de marzo de 1976
Elpidio Torres, ex dirigente del SMATA de Córdoba, uno de los gremialistas que participó en el Cordobazo. De los gremialistas que movilizaron sus sindicatos ese día del cordobazo, Torres era el menos combativo pero conducía el sindicato de los mecánicos (SMATA), el más poderoso. El “Lobito” Torres perdería en 1971 y aunque siguió activando en las filas del justicialismo su marca en la historia fue aquella participación en la rebelión popular que marcaría el comienzo del fin de la dictadura militar de los generales Juan Carlos Onganía y Alejandro Lanusse. Elpidio Torres se sumó a la protesta y fue leal con esa lucha, que lo llevaría a la cárcel junto con Tosco y otros dirigentes. La columna de los mecánicos que partió desde la planta de Santa Isabel, a siete kilómetros de la ciudad, fue uno de los ejes del acto, junto con la de los lucifuercistas y otros gremios que avanzó desde el Norte. “Elpidio no era un combativo, pero fue leal con la unidad”.
No volvió a tener un cargo electivo gremial pero hasta 1990 fue asesor del SMATA nacional. También activó en la rama política del justicialismo y se desempeñó en la Legislatura provincial como director de los senadores provinciales de su partido. Sin embargo hasta el fin de sus días fue consultado cada vez que periodistas, estudiantes o historiadores se preocupaban por conocer aspectos de una de las gestas más combativas del movimiento obrero argentino.
Alicia Wieland.: era una gringa grandota, a quien todos sus compañeros de militancia
y periodistas de entonces recuerdan con una inmensa cámara fotográfica en la mano.
Trabajaba en la revista Patria Nueva, aunque también hacía coberturas especiales
para la Redacción de El Mundo, de Buenos Aires y la revista Posición.
Nadie como ella para introducirse en zonas de peligro; por tal razón, estuvo unas
horas detenida durante el Navarrazo, uno de los primeros ensayos de golpe militar
contra un gobierno constitucional, en Córdoba, a principios de 1974.
Joven vital y decidida, ninguna como ella también para las fiestas y el baile, pero
infalible a la hora de la militancia o las tareas. Era miembro del Partido
Revolucionario de los Trabajadores, conducción política del Ejército Revolucionario
del Pueblo.
Prácticamente toda su vida continuó ligada a la militancia revolucionaria, ya que
fue detenida en Córdoba, luego trasladada a Devoto. Durante su detención sufrió
varias amenazas de muerte, entre las cuales se contó su traslado de regreso a la
cárcel Penitenciaria de Córdoba, donde reinaba el tenebroso Menéndez.
Luego de su libertad estuvo un tiempo en Europa, hasta que las condiciones políticas
argentinas le permitieron regresar. Desde entonces, continuó trabajando con
organizaciones sociales y sus compañeros de las asociaciones de Derechos Humanos.
Mi reflexión aquí es: porque ya nadie se acuerda de ellos? Porque no aparecen en la historia "oficial" ? 4 personajes de la historia de militancia la combativa que tanto me gusta!